jueves

Ay mujeres tan divinas.


Cuando las cantinas eran exclusivas para el público masculino, eran un sitio de esparcimiento de club de Toby para echar unos varios tragos, perder horas en juegos de manos y llorarle a las tragedias amorosas.


Entonces no se permitía el paso a las damas y aquello funcionaba como una enorme casa del árbol llena de botellas coloridas y cánticos tartamudos.


Al cabo del tiempo con nuevos bríos y revoluciones sexuales y sociales, las cantinas abrieron sus puertas contoneantes a otras pandillas de la misma índole, para darle el paso a las mujeres que hicieron suyo el antiguo templo masculino.


Con aquello vinieron protestas masculinas de todos lados aunque sus lamentos no fueran escuchados. Ahora las cantinas se acercan más a un salón familiar bien conocido por su comida que a un santuario de testosterona.


Sin embargo, no en todo el país se le da entrada a las féminas a pesar de estar en pleno y luminoso siglo XXI.


¿Se justifica?

¿Las mujeres deben estar dentro o debería conservarse la tradición de antaño?

¿Qué pasa en donde vives?

0 Chilangadas:

  © Blogger templates ProBlogger Template by Ourblogtemplates.com 2008

Back to TOP